Me tocaba ya escribir contando mis ultimas aventuras por esta nueva tierra que me acoge tan amigablemente, pero en estas fechas se me pasan por la cabeza recuerdos que, cada vez estan menos claros, se van borrando las imagenes y solo queda el pensamiento. Todos tenemos detras nuestra, en ese rincon del cerebro, que es como un armario trastero, a unas cuantas personas que ya no estan. Me acuerdo de mis abuelas y de mi tio, son recuerdos de la niñez, con olor a sardinas, a hierba recien cortada, a dias de sol entre frutales. Un recuerdo doloroso es el de Javi Carpintero. Irse con 16 años es cruel cuando menos; la forma en que sucedio, el dolor en todos nosotros...Luego ha habido muchas mas perdidas, el año pasado dos muy diferentes, no por ello menos dolorosas, por un lado Juan Vicente, su cuerpo no puede pelear mas y todo se acaba; por otro Sandra, un accidente laboral funesto, atras queda la natacion, el salvamento (que juergas, recuerdas?), la sincronizada y al final trabajando en lo tuyo hasta...
Que es lo que queda de nosotros cuando nos vamos? Un recuerdo en quienes nos querian, recuerdo que se va borrando de imagenes con el tiempo. Un vacio en los lugares y tiempo que compartias con otros, tambien se va borrando, o mas bien sustituyendo. La fama, esa memoria de la que nos hablaba Jorge Manrique. Que es la fama, somos famosos por algo y, solo en ese algo tiene su justa medida nuestro valor. Acaso el valor personal de un artista, un deportista o un politico, por poner ejemplos, tienen un valor añadido fuera de su actividad? Si es asi sera por su conducta, sus valores y sus acciones en general, en la vida; y es esto lo que puede perdurar en el recuerdo de una persona, o asi deberia ser, por encima de si compuso tal sinfonia, lanzo tantos triples, ... Sobre todo en estos aspectos que afectan mas a nuestro ocio que a nuestras necesidades, deporte, arte y espectaculos. Me inclino mas por admiar a heroes anonimos que con su actividad nos aportan bienestar a los demas, escasos politicos, medicos, terapeutas en general, esos misioneros y colaboradores de ONGs que tratan de hacer mas habitable el 3er mundo y la parte tercermundista de nuestro 1er mundo. Personas como Eleazar Bouffier, el imaginario plantador de arboles del fantastico cuento de Jean Giono: http://www.pinetum.org/GionoES.htm cito textualmente el primer parrafo:
"Para que el carácter de un ser humano excepcional muestre sus verdaderas cualidades, es necesario contar con la buena fortuna de poder observar sus acciones a lo largo de los años. Si sus acciones están desprovistas de todo egoísmo, si la idea que las dirige es una de generosidad sin ejemplo, si sus acciones son aquellas que ciertamente no buscan en absoluto ninguna recompensa más que aquella de dejar sus marcas visibles; sin riesgo de cometer ningún error, estamos entonces frente a un personaje inolvidable."
Tengamos pues todos la dicha de dejar "marcas visibles" cuando nos hallamos ido.
Que es lo que queda de nosotros cuando nos vamos? Un recuerdo en quienes nos querian, recuerdo que se va borrando de imagenes con el tiempo. Un vacio en los lugares y tiempo que compartias con otros, tambien se va borrando, o mas bien sustituyendo. La fama, esa memoria de la que nos hablaba Jorge Manrique. Que es la fama, somos famosos por algo y, solo en ese algo tiene su justa medida nuestro valor. Acaso el valor personal de un artista, un deportista o un politico, por poner ejemplos, tienen un valor añadido fuera de su actividad? Si es asi sera por su conducta, sus valores y sus acciones en general, en la vida; y es esto lo que puede perdurar en el recuerdo de una persona, o asi deberia ser, por encima de si compuso tal sinfonia, lanzo tantos triples, ... Sobre todo en estos aspectos que afectan mas a nuestro ocio que a nuestras necesidades, deporte, arte y espectaculos. Me inclino mas por admiar a heroes anonimos que con su actividad nos aportan bienestar a los demas, escasos politicos, medicos, terapeutas en general, esos misioneros y colaboradores de ONGs que tratan de hacer mas habitable el 3er mundo y la parte tercermundista de nuestro 1er mundo. Personas como Eleazar Bouffier, el imaginario plantador de arboles del fantastico cuento de Jean Giono: http://www.pinetum.org/GionoES.htm cito textualmente el primer parrafo:
"Para que el carácter de un ser humano excepcional muestre sus verdaderas cualidades, es necesario contar con la buena fortuna de poder observar sus acciones a lo largo de los años. Si sus acciones están desprovistas de todo egoísmo, si la idea que las dirige es una de generosidad sin ejemplo, si sus acciones son aquellas que ciertamente no buscan en absoluto ninguna recompensa más que aquella de dejar sus marcas visibles; sin riesgo de cometer ningún error, estamos entonces frente a un personaje inolvidable."
Tengamos pues todos la dicha de dejar "marcas visibles" cuando nos hallamos ido.
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